En nuestro colegio, el Proyecto Quinquenal acompaña y guía el crecimiento de los niños, asegurando que cada etapa de su desarrollo sea atendida con dedicación y respeto. Nuestro propósito es ofrecerles experiencias ricas en aprendizaje y en valores, favoreciendo su desarrollo integral, donde puedan explorar, descubrir y crecer.
En el Nivel Inicial damos especial importancia al lenguaje, el desarrollo neuromotor, la comprensión numérica, la creatividad y, de manera esencial, la formación espiritual y en valores cristianos. Todo ello se trabaja a través del juego, las experiencias activas y la vivencia de la fe, convencidos de que un niño o niña que juega y descubre en un ambiente de amor y fe, es un niño o niña motivado que aprende y crece feliz.
Nuestras estrategias educativas se basan en experiencias participativas, dinámicas y divertidas, acompañadas de una atención personalizada que respeta los ritmos de cada niño. Este enfoque permite a los pequeños conocer y reconocer su realidad interior y exterior, despertar su motivación por aprender y vivir el conocimiento como una aventura. Así, creamos un ciclo de aprendizaje creativo, interactivo y respetuoso con su desarrollo, inspirado en el enfoque de las inteligencias múltiples, que potencia todas sus capacidades.
En esta etapa acompañamos a los niños en el desarrollo de habilidades fundamentales para su crecimiento integral. Trabajamos el lenguaje fomentando la conciencia fonológica, la psicomotricidad fina y el reconocimiento de las letras, preparándolos para leer, escribir, expresarse y escuchar con atención.
Desde los primeros años también potenciamos la comprensión y expresión oral en inglés, para que los niños se familiaricen de manera natural con una segunda lengua.
En el área de matemáticas, es centrado en el desarrollo del sentido numérico mediante la exploración, el juego, la manipulación de materiales concretos y su conexión con la vida cotidiana.
Además, en el Nivel Inicial fortalecemos la inteligencia emocional y el pensamiento creativo, con actividades que estimulan la curiosidad, la autonomía y el trabajo en equipo. También se integran espacios para psicomotricidad y estimulación temprana, actividades de formación en la fe y los valores cristianos.
